Un reciente informe encargado por WWF ha destacado que la carga del plástico en términos ambientales, de salud y económicos puede ser hasta 10 veces mayor en paÃses de bajos ingresos, a pesar de que estos consumen menos plástico per cápita que los paÃses de ingresos altos. Según el estudio, el costo total a lo largo de la vida de un kilogramo de plástico es de aproximadamente 150 dólares en paÃses de ingresos bajos y medios, lo cual es ocho veces más que los 19 dólares por kilogramo en paÃses de ingresos altos.
Estas desigualdades tienen importantes consecuencias para paÃses como Kenia, que se encuentra en medio de negociaciones para el Tratado Mundial destinado a abordar la contaminación por plásticos. A pesar de medidas valientes, como la prohibición de bolsas de plástico de un solo uso, Kenia enfrenta desafÃos, como importaciones ilegales de bolsas de plástico, destacando la naturaleza transfronteriza del problema y las desigualdades en la cadena de valor del plástico.
El informe subraya que el sistema actual de plásticos, desde la extracción hasta la disposición, afecta de manera desproporcionada a los paÃses más vulnerables y desfavorecidos del planeta. La falta de influencia sobre la producción y diseño de productos de plástico coloca a los paÃses de ingresos bajos en desventaja, mientras que la producción excesiva de plástico supera la capacidad de gestión en estos paÃses. Además, la falta de rendición de cuentas en la cadena de valor del plástico resulta en que los paÃses de ingresos bajos y medios paguen el precio más alto.
Frente a estas desigualdades, WWF hace un llamado a la acción, instando a la creación de un tratado mundial de las Naciones Unidas sobre la contaminación por plásticos con reglas globales armonizadas y vinculantes. Las recomendaciones incluyen la prohibición o reducción progresiva de productos plásticos preocupantes, estándares globales para el diseño de productos y sistemas, y medidas sólidas para respaldar la implementación efectiva, particularmente en paÃses de ingresos bajos y medios. El informe destaca la urgencia de revisar el sistema actual del plástico para evitar mayores riesgos para la salud, el medio ambiente y la economÃa.